Un acuerdo confidencial de 25 millones de dólares dejó sin responsabilidad a BP de contaminar aguas mexicanas en el mayor derrame de petróleo del siglo

    Después de la explosión de la plataforma de perforación, Deepwater Horizon, en 2010, BP pagó más de 60 mil millones de dólares a Estados Unidos. Más de ocho años después, México tuvo un acuerdo con el gigante petrolero por 25 millones de dólares.

    TONALÁ, Mexico — El Gobierno Federal aceptó $25.5 millones de dólares a
    principios de este año de la gigante petrolera BP para absolverla de responsabilidad por contaminar las aguas mexicanas en el mayor derrame de petróleo del siglo XXI.

    Este pequeño pago fue parte de un acuerdo confidencial para desechar una demanda relacionada con el desastre de “Deepwater Horizon” del 20 de abril del 2010, cuando una plataforma de BP explotó en el Golfo de México. Esta explosión provocó la muerte de 11 trabajadores y la fuga de petróleo de cuatro millones de barriles sobre la costa del estado americano de Luisiana y aproximadamente 200 millas de territorio mexicano. BP y el gobierno de Estados Unidos de inmediato acordaron la reparación de la contaminación de las aguas de su territorio, pero la daño real en las aguas mexicanas es algo aún no es del conocimiento público.

    BP gastó, al menos, $60 mil millones de dólares en total respecto al derrame en 2010, más de $10 mil millones dólares fueron hacia los pescadores en Estados Unidos y negocios afectados.

    Ni un sólo peso ha llegado a los mexicanos afectados.

    BuzzFeed News tuvo acceso a documentos nunca antes vistos como minutas de las reuniones de gobierno sobre el tema y análisis académicos que cuestionan el manejo de esta crisis entre el gobierno mexicano y la empresa BP.

    La reacción del gobierno mexicano fue muy lenta después del derrame de petroleó en sus aguas. Esperaron hasta el último minuto antes de realizar una demanda contra BP. Dicha demanda se realizó el 19 de abril del 2013 y que cinco años después retirarían de manera voluntaria, después de aceptar un acuerdo por $25.5 millones de dólares. Al mismo tiempo el gobierno mexicano hizo varios negocios multi millonarios con BP en el marco de la Reforma Energética del Presidente, Enrique Peña Nieto.

    Mientras tanto, el gobierno mexicano parece haber ignorado todas las evidencias que le pudieron servir para soportar de mejor manera su caso contra BP. Varias instituciones científicas hicieron reportes que el gobierno reservó, sin dar conocimiento del impacto a la sociedad, incluidos a más de 10 mil pescadores que demandaron al gigante petrolero en búsqueda de una compensación, en demandas separadas.

    Una investigación realizada por dos años por BuzzFeeed News y la iniciativa de transparencia PODER, revela que:

    · El Gobierno mexicano retiró voluntariamente, en un acuerdo, una demanda de cinco años de antigüedad contra BP a cambio de un pago de 25.5 millones de dólares; 15 millones de dólares ya han sido pagados a pesar que no se ha dado el anuncio de manera pública del retiro o del pago.

    · Este acuerdo provocó que BP no tenga alguna responsabilidad por daños causados por el derrame de petróleo en aguas mexicanas.

    · El Gobierno de México señaló que no pudo encontrar evidencia clara de contaminación causada por BP, ignorando potencialmente investigaciones entregadas a ellos, al menos dos veces, por algunos de los científicos más respetados de México.

    · El gobierno gastó fondos millonarios en 22 estudios científicos que nunca usaron como evidencia en la demanda, esta información no fue publicada a la ciudadanía mexicana.

    · El Gobierno Mexicano, al mismo tiempo que se desarrollaba la demanda, daba numerosos contratos millonarios a BP, incluidos cinco sitios de perforaciones, dos líneas de gas natural, el desarrollo de mil 500 gasolineras.

    Estos hallazgos fueron descubiertos mediante años de búsqueda de información a través de solicitudes de información. El Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI) daba la información con demasiadas marcas en negro e ignoraban las preguntas basándose en que la demanda en Estados Unidos contra BP no les permitían dar respuesta a las solicitudes. Así como dar respuestas vagas o simplemente erróneas.

    En las entrevistas con los científicos que lideraron las investigaciones que el gobierno mexicano pagó, expresaron serias preocupaciones sobre el gobierno mexicano y la reacción de la empresa BP hacia el desastre generado y las consecuencias en las aguas mexicanas. Los científicos se quejaron que los viajes fueron limitados e insuficientes en comparación a los que se hicieron en Estados Unidos. Muchos de estos estudios dejaron de pagarse por el gobierno en el mismo periodo que se lanzaba la Reforma Energética en 2014.

    Esta revelación llega meses después de que Andrés Manuel López Obrador haya ganado las elecciones con un discurso sobre cómo acabar la corrupción, señalando la que hubo en el gobiernos anteriores, y sobre todo, con una propuesta para analizar la funcionalidad de la Reforma Energética hecha por Enrique Peña Nieto.

    Días antes de la elección se le concedió el reconocimiento máximo a un extranjero en México, la condecoración de la Orden Mexicana del Águila Azteca, en grado de Insignia, al Doctor Christopher Peter Sladen, ex Director General de BP México.

    Bajo la dirección de Sladen en México, BP hizo inversiones fuertes en los últimos años en el marco de la Reforma Energética de 2014, que abrió el sector petrolero a la inversión extranjera.

    La Secretaría de Relaciones Exteriores, publicó una foto en Twitter cuando Sladen recibió el reconocimiento del Águila Azteca. Ahí mismo estaba el Director de Pemex, Carlos Treviño, y le agradecían por "ser un aliado de nuestro país y de su industria energética".

    En una dia nublado y húmedo a mediados de junio, Evelio Jiménez caminaba por la playa en la costa de Tonalá, en el Golfo de México. Sobre esta playa se puede observar la casa de una tía, y más allá, el bote de un primo suyo. Por generaciones su familia ha vivido en estas tierras. El río Tonalá divide los estado de Veracruz y Tabasco, donde se conecta el río con el mar se le conoce como La Bocana, un pueblo lúgubre.

    En estos días no hay mucho qué pescar. Los botes se mantienen sin usar en la costa de esta comunidad. Evelio ya casi no sale a la mar. El motor de su propia lancha, La Josefa, está dentro de su garaje, explica, mientras narra que es abuelo de ocho niños. “No tengo ninguna razón de pagar por gasolina, sería como tirar dinero”.

    Jiménez y varios de sus familiares son algunos de los 25 mil pescadores a lo largo de los seis estados que tienen contacto con el Golfo de México que han demandado a BP por haber arruinado sus vidas en una demanda colectiva en Estados Unidos. Estos pescadores se unieron para presentar un caso contra BP en Estados Unidos porque no confiaron en las instituciones de México. porque ya no hay pesca. Hay especies que sinceramente ya casi no existen”.

    “Porque ya no hay pesca. Hay especies que, sinceramente, ya casi no existen."

    En un periodo de dos años, dos docenas de personas de la industria de la pesca en seis de las comunidades afectadas reiteraron a BuzzFeed News las exigencias hechas en la demanda, “El incidente Deepwater Horizon afectó de manera directa y severa la subsistencia del demandante, tanto en Estados Unidos como en México al contaminar sus tierras, la pesca y dañando el ecosistema vital para su cultura y su sobrevivencia”.


    Jiménez recuerda los días después de la explosión, veía las noticias por televisión y pensaba que todo estaba demasiado lejos, del otro lado del Golfo.

    “Se hablaba en la tele, periódicos, radio” explica. “¿Esto nos llegará a nosotros? Nunca tuvimos idea. Pero entonces, fue cuando el mal tiempo empezó”.

    En las siguientes semanas, Jiménez comenzó a oler petróleo en el aire, y veía líneasmarcadas en el océano que llegaban a la costa. Jiménez muestra cuatro fotos que tomó en esos días en la playa de Tonalá donde se ve el residuo del derrame de petróleo.

    Señala la lista de especies de peces que solía pescar en la región y cómo tenía que ir cada vez más lejos por ese tipo de peces, en los días cuando todavía pescaba, pero ni así conseguía la misma cantidad de pesca, “porque ya no hay pesca. Hay especies que sinceramente ya casi no existen”.

    Las estadísticas de pesca en el Golfo de México del gobierno mexicano no son concluyentes. Tienen información de una disminución en el número de especies en esos años, 2010, pero no hay un informe o análisis a detalle sobre lo sucedido. Los pocos estudios realizados por el gobierno son inconclusos sobre el daño del derrame petróleo.

    Descubrir si BP dañó aguas mexicanas implica mirar la respuesta del gobierno, y lo que probablemente encontraron pero nunca presentaron como información pública.


    Si a Jiménez le tomó tiempo darse cuenta de la gravedad del incidente, lo mismo pudo ocurrir al gobierno mexicano, incluso cuando expertos solicitaron reacción. Las corrientes del Golfo de México se mueven en distintos puntos, independientemente de las fronteras invisibles en el agua, incluida una corriente directa hacia el sur desde la costa de Luisiana hacia aguas mexicanas que comienza en el noreste de las costas de Tamaulipas. “Nosotros como oceanógrafos estábamos preocupados,
    sabíamos de la circulación de la corrientes en el Golfo de México… que tarde o
    temprano, tendríamos un problema en nuestras aguas”

    “Nosotros como oceanógrafos estábamos preocupados, sabíamos de la circulación de las corrientes... que tarde o temprano, tendríamos un problema en nuestras aguas." 

    “Fue una reacción tardía” por el gobierno mexicano, explica el Dr. Luis Soto, del Instituto de Ciencias del Mar y Limnología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). “Nosotros como oceanógrafos estábamos preocupados, sabíamos de la circulación de la corrientes en el Golfo de México… que tarde o temprano, tendríamos un problema en nuestras aguas”.

    En los meses siguientes al derrame en el Golfo de México, el doctor Soto y otros científicos trataron de convencer al gobierno, del entonces presidente, Felipe Calderón, que se necesitaba hacer un estudio en el Golfo. Antes del “Deepwater Horizon”, no se había monitoreado el cuerpo del agua en el Golfo de manera regular, ni tenían información de base para definir las condiciones normales del agua.

    Sin esa información, los investigadores no podrían usar técnicas básicas como la huella de carbono para examinar el nivel de contaminación por petróleo en las aguas mexicanas y saber si correspondían al derrame del Deepwater Horizon. La búsqueda de esta huella sería un conflicto entre el gobierno de México y oceanógrafos.

    En Estados Unidos no hay debate sobre las “huellas” en el Deepwater Horizon, o que BP era culpable.

    A diferencia de México, el gobierno de Estados Unidos procedió de manera rápida después de la explosión. Para finales de mayo de 2010, poco más de un mes después de la explosión, el entonces presidente Barack Obama, creó una comisión independiente para la investigación las causas de la explosión. Después de ocho meses la comisión determinó que la explosión y el derrame de petróleo, fueron consecuencia de una serie de errores y omisiones hechas por BP, y las compañías que contrataron, Hallibutron and Transocean, catalogándolo como un “desastre humano, económico y medioambiental”.

    Después de dos semanas BP comenzó a emitir comerciales en los que su CEO, en ese entonces, Tony Hayward, llamó al derrame de petróleo “una tragedia que nunca debió ocurrir”, antes de mirar a la cámara y decir , “ a aquellos afectados y sus familias, lo siento mucho”.

    La comisión estadounidense señaló que los empleados de la torre de perforación Deepwater Horizon, ignoraron señales previas, y dejaron pasaron pasar eventos para prevenir la explosión que detonó el derrame de petróleo más grande del siglo. Los investigadores de Estados Unidos recibieron mil millones de dólares en recursos, tanto del gobierno como de BP y probaron que cerca de toda la costa de Estados Unidos del Golfo de México, y desde Florida hasta Texas, estaba afectada. Encontraron líneas de petróleo en el agua, rastrearon la huella de carbono en corales dañados en el fondo del mar, vieron el decrecimiento de numerosos peces y población animal marina. Un panel federal transfirió todos los casos relacionados con el derrame a un juzgado en Luisiana por la experiencia en casos complejos como el del Huracán Katrina. BP, eventualmente, aceptó su responsabilidad y se declaró culpable y de ahí apilaron demandas de todos los afectados en Estados Unidos.

    Los intentos para hablar con Chris Sladen y para organizar entrevista con representantes de BP USA y BP México fueron declinadas o ignoradas. BP USA explicó en una correo electrónico que “toda la evidencia disponible confirma que el petróleo del incidente de Deepwater Horizon, no alcanzó las aguas mexicanas o sus costas”, y anexaron un reporte elaborado por científicos estadounidenses.

    El gobierno mexicano había decidido financiar en julio del 2010, una investigación por varios académicos e institutos mexicanos en coordinación del Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático (INECC). El equipo del Dr. Soto fue el primero en lo que sería un plan de estudio de cinco años en el Golfo.

    México sólo tenía un bote capaz de hacer las expediciones. 

    El Dr. Soto señaló en repetidas ocasiones a BuzzFeed News cómo su equipo no tenía fondos y cómo el equipo estaba debajo del nivel de sus vecinos norteamericanos. México, explicó, sólo tiene un barco capaz para este tipo de expediciones que tenía que ser apartado y compartido con numerosos institutos involucrados en el estudio. En contraste con los 6,500 buques que usaron en Estados Unidos para medir el daño en las aguas estadounidenses según BP.

    Dos años después del derrame de petróleo cuando Enrique Peña Nieto toma protesta como Presidente de México y anuncia sus planes de reformas. Entre ellas la energética con un plan ambicioso que permitiría la inversión extranjera.

    Es hasta la primavera de 2013, cuando Enrique Peña Nieto ya es Presidente, cuando se decide demandar a BP por dañar aguas mexicanas.Después de esto, la investigación de Soto, sobre los efectos del derrame de petróleo, fue suspendida por el gobierno. Después de terminar una tercera excursión de investigación ese año, el resto de sus estudios programados quedaron cancelados.

    “De repente fuimos informados por el Gobierno Federal que no había recursos para apoyar la campaña,” comenta Soto. “Enfáticamente dijeron, 'nuestras prioridades cambiaron'”.

    El Gobierno Mexicano financió 22 estudios relacionados con el derrame de BP entre el 2010 y 2014. Documentos oficiales revelan que por 19 de estos estudios pagaron cerca de los cuatro millones de dólares, pero el resto de los tres estudios el INECC no dio las cifras, así que no hay un total revelado. En contraste, en los Estados Unidos, un grupo de estudios creado por BP hizo más de 240 estudios para el costo total de1.3 mil millones de dólares, en menos de cinco años después del derrame. Esto no incluye los numerosos grupos e instituciones que estudiaron las aguas americanas.

    “Somos vecinos y tu casa está en llamas- Y somos realmente vecinos cercanos y me dices que, ¿realmente no pasó nada?"

    El INECC dijo a BuzzFeed News que no cancelaron los estudios, sino agotó todo el presupuesto posible. El INECC describió el presupuesto como “adecuado” pero confirmó que les faltaron recursos, específicamente por el único bote que tenían para realizar los análisis. Expresaron que, si bien fue más sencillo el estudio de los efectos del derrame de Deepwater en las aguas de Estados Unidos por su proximidad, fue mucho más difícil de establecer un impacto en las aguas mexicanas. El INECC agregó, “Sin embargo, es responsabilidad del Gobierno de México llevar a cabo un monitoreo para determinar el daño potencial considerando que se trata de un ecosistema interconectado. Este tipo de eventos puede tener impactos de largo plazo”.

    19 de los 22 estudios habían sido aprobados antes que el gobierno mexicano demandara a BP. Ningún otro estudio fue financiado después que Enrique Peña Nieto emitiera la Reforma Energética en agosto de 2014, lo que provocó cuestionamientos sobre si el gobierno quería llegar a toda la información sobre el caso del derrame de BP.

    Soto señala en repetidas ocasiones sobre el poco apoyo recibido por el gobierno, el corte de recursos antes de que pudiera terminar. Está convencido que la región del Golfo necesita otros estudios y que BP seguramente es el responsable del daño a las aguas mexicanas.

    “Somos vecinos y tu casa está en llamas- Y somos realmente vecinos cercanos y me dices que, ¿realmente no pasó nada?", pregunta de manera retórica. "Es ridículo".

    En el año 2000 BP, una de la compañías petroleras más grandes, decidió someterse a un cambio de marca para crear una imagen amigable con el ambiente. Gastaron más de 150 millones de dólares en el nuevo logo, un girasol, llamado “Helios” por el dios griego del sol.

    Un conglomerado internacional con presencia en 72 países del mundo. BP tiene una tercera parte de sus negocios en Estados Unidos, por mucho su mercado más grande. “Helios” se le relacionó primero con un desastre en 2005. Una explosión en una refinería en Texas City que mató a 15 trabajadores y 170 heridos. BP pagó más de 1.5 mil millones de dólares en compensaciones. Menos de un año después, unas corroídas tuberías de BP en Alaska tuvo una fuga de cientos de litros de petróleo, el estado afectado recibió 225
    millones de dólares
    de BP y sus asociados.

    Se pagaron mil millones de dólares en Estados Unidos. 

    Cuando sucedió el incidente en el Golfo de México todavía no se habían pagado por completo las compensaciones en estos dos últimos casos. Imágenes de delfines y pelícanos cubiertos por petróleo dieron la vuelta al mundo y con esto, BP estaba en el centro de un desastre medioambiental.

    A pesar que el derrame ya no estaba en la conciencia pública en los años siguientes, continuaron llegando demanda tras demanda a la corte del estado de Luisiana, y mil millones de dólares se habían pagado a intereses de Estados Unidos.

    En México todo era muy diferente.

    Varios estados de México con costas en el Golfo de México presentaron demandas por separado en 2011, pero el gobierno federal esperó dos años y 364 días para demandar a BP, hasta el último día posible. Cuando finalmente hicieron la demanda el 19 de abril de 2013, alegaron que, “El derrame se mantiene en las aguas del Golfo de México poniendo en peligro las costa contiguas de México… El Golfo de México es afectado por las corrientes profundas que corren de este a oeste en patrones circulares, en cuyas corrientes se ha movido petróleo, dispersando químicos en las aguas mexicanas”.

    Un mes después, en mayo de 2013, la corte del estado de Luisiana consolidó la demanda de México en un litigio multi distrital y empaquetando cientos de nuevos casos. La corte después suspendió la demanda del Gobierno Federal hasta previo aviso. Meses después, la corte descartó las demandas que llevaron los estados de México porque el gobierno mexicano enviaría una demanda federal y haría las demás demandas redundantes.

    Esta demanda federal representaría la última oportunidad para que el gobierno mexicano consiguiera un pago compensatorio hacia los pescadores y sus familias.

    Según información dada por la Secretaría de Relaciones Exteriores, en respuesta a solicitudes de información, la demanda presentada en Estados Unidos no tuvo ningún avance entre mayo de 2013 y marzo de 2018, cuando el Estado Mexicano decidió llegar a un acuerdo con BP sobre su caso. Esta decisión fue basado en un acuerdo de voluntario para descartar el caso. Este acuerdo fue visto por BuzzFeed News, firmado por el Gobierno Federal y BP en febrero de 2018. Dejando a la petrolera libre de toda responsabilidad en el daño de las aguas mexicanas a cambio de 25.5 millones de dólares.

    El equipo legal que representaba a México en Estados Unidos, Schulte Roth & Zabel, recibió casi dos millones de dólares por sus servicios entre 2010 y 2017(las cifras de los pagos en 2018, no están disponibles). Schulte Roth & Zabel rechazaron una entrevista para esta historia.

    Horacio Polanco, uno de los abogados representantes de los más de 10 mil pescadores mexicanos señaló que le parecía injusto que sólo los vecinos del norte de la frontera
    hayan recibido el pago de BP. “La única injusticia es que los pagos se hicieron
    exclusivamente para los americanos”, explica.

    BP no aceptó ninguna responsabilidad por daños al territorio mexicano, y mientras las demandas contra la compañía se estancaban, BP rápidamente se movían hacia el nuevo mercado energético con inversiones fuertes hacia la Reforma Energética de Peña Nieto.

    Horacio se preguntaba, “BP quiere ser socio de México en la explotación de los yacimientos de aguas profundas ¿Cómo vas a sentar en tu mesa a alguien que no te trata con respeto?” se preguntó Polanco.

    A BP le fue muy bien con ese lugar en la mesa. Ganó los derechos a tres bloques de petróleo en el Golfo de México, con una compañía subsidiaria llamada Pan American, además de dos contratos por dos líneas de gas natural, y un acuerdo para abrir mil 500 gasolineras en 2021. La SRE dijo a BuzzFeed News no hubo conflicto de interés cuando se negociaron estos acuerdos con BP.

    Estos nuevos acuerdos se suman a las cuatro plataformas que tiene BP en las aguas de Estados Unidos en el Golfo, que producen más de 300 mil barriles al día. BP planea empezar a perforar en 2020 muy cerca de Verazcruz y Tabasaco, sobre la costa de Tonalá.

    BP no aceptó ninguna responsabilidad por daños al territorio mexicano, y mientras las demandas contra la compañía se estancaban, BP rápidamente se movían hacia el nuevo mercado energético con inversiones fuertes hacia la Reforma Energética de Peña Nieto.

    “La única injusticia es que los pagos se hicieron para los americanos." 

    Esta reforma de 2014 fue una de las iniciativas más sorpresivas de su mandato, al abrir el sector energético a la inversión extranjera por primera vez en 80 años. Las primeras tres rondas se vendieron más de 100 contratos petroleros con la promesa de inversión de más de $100 mil millones de dólares. Muchos economistas esperaban que este momento iba a marcar un momento revolucionario en sus fortunas.

    Horacio se preguntaba, “BP quiere ser socio de México en la explotación de los yacimientos de aguas profundas ¿Cómo vas a sentar en tu mesa a alguien que no te trata con respeto?” se preguntó Polanco.

    Jiménez, el pescador, está frente a sus nietos, aún asombrado por lo que vio a su visita al Puerto de Veracruz para ver a su abogado. Todos ellos, mirándolo con atención cómo describía el letrero de BP y el logo de un girasol en una gasolinera, “trabajando con calma, como si no hubieran hecho nada de esto”.

    Los pescadores tendrán que acostumbrarse a esto, las gasolineras de BP se están haciendo en toda la República, ya están, al menos en la mitad del país, incluido Veracruz y Tabasco.

    “¿Ahora ellos trabajarán en las plataformas? Esto será aún peor”, reclama. “¿Porqué no quieren solucionar el problema que
    hicieron con nosotros?

    “¿Porqué no quieren solucionar el problema que hicieron con nosotros?

    Jiménez sólo puede observar mientras BP invierte en México. Esta semana, el 29 de septiembre, BP anunciará su último programa en México así como el presupuesto para el proyecto. La inversión en México es de 200 millones en las plataformas.

    “¿Porqué no quieren solucionar el problema que hicieron con nosotros?, se pregunta Jiménez. “Ya están en el país, sacando dinero de aquí. El gobierno aceptó a la compañía venir como si fuera Juan por su casa”.

    La familia Jiménez vive en una casa con un cuarto, que tiene muchas deficiencias. Entre ellas está el cómo se cubren de la lluvia en temporada de lluvias. Se observa parte de la propaganda política que se queda en cada elección, entre ellas, del PRI.

    “Pues que estamos olvidados de los gobernantes, de los políticos, de los presidentes de la república. Existimos ya, porque vivíamos de la pesca. Vivíamos de la pesca. Pero actualmente esto se acabó”.

    El 15 de febrero de 2018, el Gobierno Mexicano aceptó el pago de 25.5 millones de dólares de BP, tras el acuerdo logrado en la demanda de las dos partes, quitándoles de toda responsabilidad de daño a las aguas mexicanas por el derrame de petróleo.

    Documentos de la corte sobre el retiro voluntario de la demanda, minutas de varias de las reuniones de gobierno del 2014 al 2017 y una revisión de estudios científicos clasificados como reservados, aparentan mostrar que el gobierno ignoró evidencias científicas sobre la culpa de BP en el derrame de petróleo. En lugar de eso, el gobierno Federal, aceptó lo que sería un acuerdo que beneficia más a un lado que a los dos.

    Para entender la situación se solicitó información mediante las herramientas de transparencia en los últimos dos años. Vía esta instancia de solicitud de información, la autoridad competente, ignoró algunas de las preguntas, y las pocas respuestas eran poco claras, y con errores de ortógrafía así como información incorrecta, como fechas, y costos.

    Lo que esta respuesta ante una solicitud de información mostró es hacernos entender que la administración pública está fallando en poner a sus ciudadanos primero.

    En respuesta a una solicitud de información a la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) en 2016, explicó que no podría dar respuesta hacia cómo iba el proceso de demanda en Estados Unidos porque “pondría en riesgo los reclamos del gobierno en busca de una compensación”. Al año siguiente el INECC dijo que no podría dar conclusiones de sus estudios porque la información era reservada mientras el caso estaba abierto.

    En mayo de 2018 los científicos que participaron en los estudios dijeron que no tenían permitido difundir su trabajo sin que el INECC lo dijera. El instituto pasó la responsabilidad a la SRE diciendo que “la posibilidad de desclasificar la información está siendo analizada por la Secretaría de Relaciones Exteriores”.

    Esto ya es después de que el gobierno mexicano aceptara el pago de 25.5 millones de dólares y se desestimara la demanda en marzo, lo cual no tendrían justificación legal para no dar la información solicitada.

    Una revisión a las minutas por parte de BuzzFeed News de las juntas realizadas en la SRE en la Ciudad de México revela que los oficiales habían discutido sobre una posible negociación con BP desde febrero de 2017. Después en julio de 2017, miembros del INECC, de Relaciones Exteriores y los abogados en Estados Unidos se reunieron con representantes de BP en Nueva York para negociar el suprimir la demanda y esto pasaría en febrero de 2018.

    En estas juntas BP ofreció un pago inicial de 20 millones de dólares. En octubre el gobierno mexicano hizo una contra oferta pidiendo 50 millones.
    Y al final BP no ofreció más de 25.5 millones, la mitad de lo que se había pedido.

    Según el acuerdo establecido, al cual tuvo acceso BuzzFeed News, 15.3 millones son para el “Reembolso de las investigaciones realizada y otros costos realizados sobre el incidente de Deepwater Horizon”. 10.2 millones de dólares para pagar al INECC “Para el programa protección socio-ambiental y conservación y restauración del Golfo de México”. No hay una explicación detallada sobre cómo se va a gastar el dinero, o de quién se encargará que el dinero se distribuya equitativamente.

    Esto no es nada en comparación con los 500 millones de dólares en un programa de 10 años para supervisar la aguas de Estados Unidos en el Golfo que se estableció un mes después del derrame de petróleo. Y sin contar los más de 60 mil millones que BP pagó a Estados Unidos en compensación por el derrame de petróleo.

    El documento legal dice que el acuerdo permanecerá confidencial hasta que las dos partes estén de acuerdo en hacer pública la información. Hasta la fecha ni BP ni el gobierno mexicano han anunciado algo sobre este acuerdo.

    15.3 millones se habrían pagado el 15 de mayo y el resto, lo 10.2 millones se pagarán el 30 de noviembre, el último día de gobierno de Enrique Peña Nieto.

    En el acuerdo no hay ninguna mención hacia los pescadores mexicanos.

    La SRE y el INECC expresaron que la primera parte había sido depositada por BP a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP). Ambos señalaron que no ellos no serían responsables sobre el saber en qué se gastará el dinero. El último pago irá hacia un programa, aún no especificado, y ambas instituciones no sabrían como supervisar este dinero.

    No hay claridad sobre si los pescadores mexicanos recibirán algo de este dinero.

    El Gobierno mexicano retiró su propia demanda, pero hay evidencia que hace creer que sí se encontraron rastros de huellas de carbono y que posiblemente se hayan ignorado.

    BuzzFeed News puede revelar que al Gobierno Federal se le dio evidencia científica que se haya localizado huella de carbonos, pertenecientes a BP en aguas mexicanas. La evidencia fue presentada como parte de una demanda por el científico llamada Dr. Sergio Jiménez.

    El 24 de enero de 2013 la corte de Luisiana recibió una declaración del Dr Jiménez donde explicaba que había encontraron rastros de petróleo en las costas de Tamaulipas, llamándole “un parecido idéntico a la huella que dio BP en el litigio de Deepwater Horizon”. El Dr. Jiménez, quien trabajó por más de una década como oceanógrafo para el gobierno de Tamaulipas, dijo, además que había encontrado rastros de petróleo al sur de Veracruz en 2011.

    Sergio Jiménez dijo a BuzzFeed News que se mantenía a sus aportaciones, que él tiene suficientes pruebas “para demostrar que hubo daño en las costas mexicanas, al menos en Tamaulipas, debido al derrame de petróleo de BP”.

    En una respuesta a una solicitud de información revela que en una reunión de enero de 2014, personas de gobierno, entre ellos de Relaciones Exteriores y del INECC, discutieron usar evidencias de las otras demandas presentadas en Estados Unidos contra BP. Esto es antes que el gobierno metiera su demanda federal y se desconoce porqué nunca se usó.

    El Dr. Jiménez no fue el único científico que descubrió la huellas de carbono.

    En julio, el gobierno finalmente publicó 20 de los 22 estudios realizados. Ninguno de ellos dio información sobre descubrir huella de carbono de BP. Los otros dos estudios son del Instituto México del Petróleo (IMP).

    Los estudios del IMP fueron los últimos en ser aprobados antes de la reforma Energética de 2014. El IMP dijo que a estos documentos no se les dio difusión por “contener secretos industriales y comerciales” diciendo que, “los lugares donde (IMP) trabajó para su investigación así que la información en sí era estratégica”, agregaron en una vaga declaración “que los resultados de los estudios “no señalaban daños medioambientales”.

    Sin embargo, mientras el gobierno trataba de no dar la información, cinco científicos del IMP publicaron en 2017 un artículo para Marine Pollution Bulletin, una publicación científica. Ahí detallaron cómo encontraron rastros del derrame de 2010 en aguas mexicanas. Explicaban que descubrieron numerosos contaminantes de petróleo en más de las mitad de las ubicaciones de DeepWater, y que este incidente parece ser la fuente de dicha contaminación.

    El jefe de investigaciones del IMP declinó la entrevista a BuzzFeed News explicando que no está autorizado a hablar en los medios.

    En las últimas declaraciones de Enrique Peña Nieto ante los medios como Presidente, ha dicho que su legado está en el desarrollo de las Reformas, “para mí es el legado más importante, porque la maduración de esas reformas se va a traducir en mayor crecimiento económico, generación de mayores oportunidades para los mexicanos”.

    Andrés Manuel López Obrador, toma protesta el primero de diciembre y dentro de sus primeras acciones será ver que la Reforma Energética se haya realizado limpiamente. Ha pospuesto la última ronda de contratos hasta el siguiente año. Y ha advertido que tendrá cero tolerancia en la industria petrolera.


    Mauricio Gómez, yerno de Evelio Jiménez, dejó la escuela cuando tenía seis años para convertirse en un pescador, pero ahora dice que apenas y puede darle de comer a sus tres hijas. Dice, constantemente, que se sintió “humillado” por el gobierno mexicano y BP. Espera que López Obrador resuelva la situación que se dio en el Golfo de México, diciendo que pocas personas en México son tan “abandonadas” como los pescadores.

    “Ningún candidato toma en cuenta a los pescadores. Ninguno. Ellos toman en cuenta la industria petrolera, que es la que funciona con el gobierno”, explica Gómez. “No existimos para el gobierno”.

    La hija mayor de Mauricio está por graduarse de la secundaria. Se acuesta en una hamaca, y cuando le preguntan si seguirá la profesión de pescadores de su familia, ella responde que no, “ya no hay peces”.

    En lugar, explica que se unirá a la Marina y trabajará para el gobierno, del que tanto dice su padre, los dejó abandonados.

    ¿Por qué?

    “Para que pueda seguir trabajando en el mar”, contesta. ●


    Claudia Ocaranza de la unidad de periodismo de la iniciativa de transparencia PODER contribuyó en este reportaje.

    Este post fue traducido del inglés.