Este es Bill Lindler, un bombero en Goose Creek, Carolina del Sur, con el cachorrito que rescató el año pasado, Jake.
En abril del 2014, Lindler notó humo y llamas viniendo de la propiedad de un vecino. Cuando él y otros bomberos entraron al edificio, Lindler vio a Jake acurrucado en una esquina, acabando de salir de debajo de un pedazo de techo en llamas.
"Él estaba bastante asustado y no se movía mucho", contó Lindler al Noticiero BuzzFeed. "Creemos que estuvo en la esquina del edificio por alrededor de 10 minutos antes de que llegara a él".
Cuando sus vecinos le dijeron que no podían asumir los gastos del veterinario del cachorro, Lindler habló con su esposa sobre adoptar a Jake.
El cachorro tuvo que quedarse 24 horas bajo cuidado médico por seis semanas, pero eventualmente pudo ir a casa. "Mi familia simplemente lo tomó tal y como estaba predestinada a hacerlo", dijo Lindler.
Conforme Jake se recuperaba gradualmente de sus quemaduras, pronto se convirtió en un accesorio muy amado en el trabajo de Lindler, el Departamento de Bomberos Hanahan.
"Lo traía aquí para los desplazamientos", dijo Lindler, "y luego el jefe tuvo la idea de hacerlo un bombero".
En Diciembre, Jake fue juramentado como un bombero de la ciudad y también se convirtió en la mascota oficial del Departamento de Bomberos Hanahan.
Ahora hace tour por los colegios con Lindler para educar a los niños sobre la importancia de la seguridad contra incendios.
También está en entrenamiento para convertirse en un perro detector de incendios provocados, ayudando a los bomberos a olfatear acelerantes y líquidos inflamables en un sitio quemado una vez que se ha extinguido el incendio.
"Estuve en el lugar correcto en el momento adecuado", dijo Lindler sobre rescatar a su nuevo mejor amigo. "Estuve allí por él. Simplemente estaba destinado a ser así".
h/t Panda